Como regla general en ocasiones no se permite a los padres el acceso al
área de tratamiento, con el fin de valorar la conducta de los niños. Esto hace
que el doctor y las asistentes establezcan una excelente relación con el niño.
La experiencia muestra que muchos niños lloran ante
esta separación y debe considerarse una respuesta normal a una situación nueva
y extraña para él, por lo que el menor será tratado con comprensión y paciencia,
haciendo lo posible por ayudarlo a eliminar sus temores dentales.
Se cuenta con una pantalla en la sala de espera, para
que observe el procedimiento que se le esté realizando al niño.
Mientras el niño se encuentra en el área de tratamiento,
puede escoger una película infantil y verla durante su atención.